Contenedores marítimos, uno de 20 pies y otro de 40, transformados en laboratorio móvil que gracias a su diseño sin modificar las dimensiones exteriores pueden ser enviados a cualquier lugar del mundo en un buque portacontenedores sin tener que pagar sobredimensiones,  como si fuera un contenedor marítimo más. Nótese que las ventanas tienen unos protectores para el transporte y los aires acondicionados son retráctiles para que se pueden esconder y no romper las medidas estándar del contenedor marítimo cuando sean transportados.

Un punto muy importante a tener en cuenta en esta y otras transformaciones de contenedores marítimos es el aislamiento térmico. Debido a que el contenedor marítimo es una caja de hierro en su interior y sin aislamiento hace mucho calor en verano y mucho frío en invierno. Por eso cuando en el interior del contenedor van a trabajar personas siempre solemos poner un aislamiento térmico que consta de un aislante más un panel sandwich. Este tipo de acabado además de proteger de la temperatura queda más bonito.

Cada laboratorio móvil tienen todos los detalles que solicitó el cliente sobre plano como son: grifos, tomas de corriente, líneas eléctricas, mobiliario y desagües.